La Sociedad Almería Alta Velocidad acuerda iniciar el proyecto de la segunda fase de integración del ferrocarril en la ciudad

El secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Fomento, Julio Gómez-Pomar, ha señalado que la sociedad Almería Alta Velocidad se planteará un plan de negocio para financiar las actuaciones que, por fases, conllevarán el soterramiento de las vías del tren en la ciudad y que supondrán una inversión de unos 272,83 millones de euros en su conjunto. Gómez-Pomar ha apuntado tras los acuerdos y mediante una adenda se encargará a Adif que licite y obtenga el anteproyecto, el proyecto básico y el proyecto constructivo de las distintas fases.
Así una vez se obtenga el primero de ellos, se podrán “afinar” las cifras y decidir así los compromisos financieros de cada administración y un calendario de actuación.
En concreto, según las previsiones de la sociedad, el coste de la actuación de integración ferroviaria conllevará un desembolso de unos 236,5 millones de euros mientras que el resto, unos 36,38 millones, se destinarán a actuaciones urbanísticas y gastos administrativos.
La segunda fase del soterramiento abarcarán desde la actuación en El Puche hasta la Avenida del Mediterráneo, por donde circularán tanto trenes de pasajeros como de mercancías ya que se establecerá un ramal subterráneo que conecte con el puerto, por un lado, y por otro una rampa de salida de casi 500 metros para la salida a superficie hasta la estación.
La última fase irá desde la Avenida del Mediterráneo hasta la Estación Intermodal, que además se someterá a renovación con una inversión de unos 50 millones de euros para acoger la Alta Velocidad bajo nivel, ampliar la zona de autobuses con nuevas dársenas separadas de la estación ferroviaria y contar con aparcamiento subterráneo que comunique directamente con la nueva estructura, entre otras mejoras.
La actuación para acabar con la división de la ciudad se iniciarán con la supresión del paso a nivel de El Puche, cuyas obras ya han sido adjudicadas a la empresa Comsa por 15,4 millones de euros y un periodo de ejecución de 13 meses. Los trabajos adjudicados arrancarán previsiblemente en junio y supondrán la interrupción del tráfico ferroviario en la capital, con la estación Huércal-Viator como punto de origen y destino y lanzaderas desde Almería para cubrir el tramo de 6,5 kilómetros.
A diferencia de esta primera fase, que se acometerá simultáneamente con la adaptación del tramo de 1,7 kilómetros en el tramo del río Andarax y en el que se ubicarán posteriormente el espacio de reserva y los talleres de Renfe, las obras de la segunda y tercera fase no prevén, en principio, la interrupción del tráfico ferroviario hasta la intermodal; aunque serán los proyectos los que determinen cómo se gestionará la movilidad.
No obstante, no está previsto que las actuaciones constructivas sobre el casco urbano puedan tener suficiente continuidad para solaparse entre sí, lo que dará lugar a la interrupción y reanudación de las obras con las que, por otra parte, se suprimirá el túnel de La Goleta, el puente de la Avenida del Mediterráneo o el puente de Los Molinos, entre otras actuaciones en beneficio de la trama.
El alcalde de Almería se ha felicitado por el avance del proyecto para soterrar las vías del tren dado que “ya no es un sueño ni una promesa, es una realidad con plazos que los almerienses empezaremos a disfrutar dentro de muy poquito”, según ha valorado ante la encomienda a Adif de los proyectos para “la obra civil más importante de nuestra historia”.
Así, confía en que la entidad de infraestructuras “apretará el acelerador” para que los proyectos estén “en la primavera del año que viene lo más tardar” y así hacer el estudio de negocio que determine la financiación de la actuación. “El acuerdo ha sido muy positivo”, ha asegurado el primer edil.