700 personas alzan su voz en Almería contra el ascenso de VOX en el Parlamento Andaluz

Alrededor de 700 personas, en su mayoría jóvenes, se dieron cita anoche en la Puerta de Purchena, para protestar contra lo que consideran el ascenso del fascismo a la política de Andalucía tras haber logrado VOX 12 escaños en el Parlamento Andaluz. Una convocatoria que al igual que ha ocurrido en Málaga, Granada o Sevilla nació de manera espontánea a través de las redes sociales, sin haberse comunicado a la Subdelegación del Gobierno y a la que acudieron colectivos almerienses feministas, estudiantiles o LGTBI. Entre los participantes apenas se distinguían rostros de autoridades políticas. Solo algunos representantes de la confluencia de izquierdas Adelante Andalucía y algún dirigente socialista acudieron a la movilización.
Concentración que en un principio fue silenciosa a la espera de como se iba a desarrollar este llamamiento pero que minutos después se convirtió en un clamor de los cada vez más almerienses que llegaban a la Puerta de Purchena.
Así, los participantes comenzaron a vitorear frases como "aquí están los antifascistas", "Almería será la tumba del fascismox" o "Vox, escucha, estamos en la lucha". “Que no, que no, que no tenemos miedo”. “No pasarán”. “Fascismo legal, vergüenza nacional”. “Franco no ha muerto, está en el Parlamento”. “La lucha sigue, cueste lo que cueste”.
Pasadas las ocho de la tarde  la multitud optó por realizar el habitual recorrido de las manifestaciones que se llevan a cabo en la capital y llegar hasta la plaza de Las Velas, al final de la Rambla. Precedidos y seguidos en todo momento por efectivos de Policía Nacional , los manifestantes hicieron varias paradas en el camino para echarse al suelo y, durante varios minutos, permanecer sentados. 
La concentración generó un despliegue preventivo de agentes en la Puerta Purchena y el Paseo de Almería. La Comisaría Provincial de la Policía Nacional y la Jefatura Municipal de la  Policía Local en Almería desplegaron un amplio dispositivo de seguridad que, ciertamente, funcionó. No hubo incidentes. Ni siquiera conatos.
Los agentes reaccionaron con prudencia ante el cambio de rumbo en la concentración y se adaptaron sin problemas a las exigencias de una cita que mutó desde las 19 horas. Los manifestantes también ayudaron con una protesta enérgica, pero pacífica en todo momento, se disolvió sobre las 21 horas. Como sucedió en otras ciudades de la comunidad, las protestas se sucedieron sin altercados.
La Policía Local había activado a todos sus agentes disponibles ante el riesgo de incidentes. Además, la Policía Nacional envió a los miembros de la UPR (Seguridad Ciudadana). Preocupaba especialmente un posible cruce con grupos de extrema derecha, más aún tras el incidente vivido hace diez días en Puerta Purchena.