Inmigración y delincuencia, son los principales retos a los que se enfrenta la Comisaría Provincial de Almería. Dos problemas a tratar de manera prioritaria según ha manifestado el nuevo comisario jefe, Adolfo Castaño, en su intervención en la celebración del día de los Ángeles Custodios.

Ya lo avanzaba semanas atrás cuando juró su cargo, apuntando que su objetivo en esta nueva andadura profesional es el de reducir aún más los índices de delincuencia y avanzar en el control de la llegada de inmigrantes a nuestras costas.

Para Castaño "la llegada de pateras es actualmente uno de los principales y más graves problemas que afronta la Comisaría de Almería", por lo que insistió en que "es necesario volcar todos los esfuerzos y medios para atajar este tema".

Un claro ejemplo, según el comisario jefe, son los 103 inmigrantes que permanecían en la mañana de ayer en los módulos del puerto de Almería a la espera de pasar a las dependencias policiales donde se les tramitarán los correspondientes expedientes de expulsión de nuestro país.

Todos ellos intentaban llegar a las costas de Cabo de Gata, Garrucha y Carboneras en siete pateras interceptadas por las fuerzas de seguridad del Estado a lo largo de este fin de semana.

Por último señalar que durante este último año se ha producido un notable descenso de la criminalidad en Almería capital, dado que el número de delitos y faltas ha descendido un 20%, sin olvidar que se han alcanzado niveles de eficacia policial jamás registrados en nuestra ciudad.