La UD Almerí­a sigue perdido en la Liga

El Almerí­a vio como se le atragantó la Liga y tras el atracón goleador de la Copa, el Mallorca le devolvió la goleada en el torneo de la regularidad. Los isleños y los de Oltra se veí­an las caras pero ahora con los tres puntos en juego que se quedaron en las arcas de los de la isla.


El Almerí­a ha vuelto a la cruda realidad de la Liga. Tres dí­as después de dejar en la cuneta al Mallorca en el torneo copero, los almerienses regresaron a la isla para afrontar la jornada del campeonato de la regularidad y salieron goleados. Con esta nueva derrota liguera, tercera consecutiva, el equipo sigue penúltimo en la clasificación y necesita reaccionar cuanto antes para evitar quedarse hundido en los puestos de abajo.

El conjunto que dirige Oltra tuvo un comienzo de partido realmente esperanzador, pero regaló dos goles y se fue al descanso con una desventaja. Los almerienses dieron la cara en todo momento, y llegaron a acortar distancias, aunque el Mallorca, que se sacó la espina de la Copa, sólo tardó un minuto en poner de nuevo la diferencia de dos tantos en el marcador, algo que ya pesó mucho y que fue determinante para que el Almerí­a saliera derrotado del Iberostar Estadio. El conjunto almeriense tuvo una salida realmente espectacular. Buena prueba de ello es que al minuto de juego ya habí­a gozado de oportunidades de gol. Sin embargo, Ramis, y Ví­ctor Casadesús poní­na los goles para el resultado con el que se llegó al descanso, con esa clara ventaja de 2-0.

En el segundo tiempo el inicio de este perí­odo el Almerí­a buscó el empate con decisión, y en el minuto 65 acortaban distancias, por medio de Crusat, que desde el borde del área, marcaba con un tiro ajustado al palo. Pero un minuto después Nsue batí­a a Diego Alves. En el minuto 87 Pereira, poní­a el 4-1 definitivo.

En resumen, nueva derrota en la Liga de un Almerí­a que sigue sin encontrar el equilibrio por el que tanto aboga su entrenador, y que en el aspecto defensivo continúa dando facilidades, en esta ocasión a los mallorquines que se sacaron la espina de su eliminación copera.