Los datos negativos siguen golpeando la economía y siguen dándole más significado a la palabra crisis. Los datos económicos de la provincia de Almería, ofrecidos hoy por la Cámara de Comercio de Almería y por Cajamar, muestran una situación de retroceso en los diferentes sectores de la economía.
Si los desglosamos por divisiones, la construcción fue el primer sector que sufrió los azotes y que originó un efecto dominó con otros, ya que mermó la cifra de negocio de muchas empresas industriales, comerciales y de servicios. Se contabilizaron 2.347 viviendas iniciadas, lo que supone un descenso del 53,4 por ciento, y sólo se han contabilizado 774 nuevos proyectos, de los, por ejemplo, los 35.515 que se llevaron a cabo en 2005.
Y si hablamos de construcción en Almería hay que dirigir la mirada hacia el sector del mármol, que también se une a las cifras negativas que sufrieron, sobre todo, las 1.000 personas que se quedaron en paro, lo que significó un crecimiento del 29,7 por ciento respecto a 2008, siendo Macael y Olula del Río lo más castigados.
En 2009, la destrucción de empleo fue un recurso necesario para abaratar los costes empresariales, aunque el deterioro de la economía persistió y llevó a muchas empresas al cierre. Así, se produjo un descenso de 3.462 altas fiscales en el Impuesto de Actividades Económicas.
La agricultura, uno de los pilares básicos de la economía almerienses, disminuyó en 2009 en un 7, 6 por ciento en valor y un 4,2 por ciento en toneladas, siendo este caso una consecuencia del descenso registrado en la producción de tomate, un 15, 5 por ciento menos y de melón un 10,7 por ciento.
El año cerró con un descenso en indicadores como la matriculación de turismos, un 17,4 por ciento menos; los viajeros alojados en hoteles, un 9,4 por ciento; la compraventa de vivienda, que bajó en un 24,2; o el tráfico marítimo de mercancías que, después de dos décadas sin dejar de crecer, retrocedió un 8,4 por ciento.
Otros sectores, como el de servicios tampoco se salva. Se dieron bajadas generalizadas en los indicadores de transporte, comercio o actividades inmobiliarias.
En el financiero, se concedió un 1,3 por ciento menos de créditos y un 10,1 por ciento de hipotecas. Y para finalizar con este repaso por los datos de la economía almeriense en 2009, nos fijamos también en el turismo, que sufrió de lleno las consecuencias de esta crisis. Un 16,1 por ciento menos de turistas es el dato que mejor refleja este balance negativo. Una situación que estuvo marcada sobre todo por el descenso en el turismo internacional con la llegada de 150.000 pasajeros menos en el Aeropuerto de Almería.