La Consejería de Fomento y Vivienda ha comenzado ya los trabajos de construcción de la última intersección de la variante de Roquetas de Mar, que se centran en la conexión con la carretera de La Mojonera en la población de Cortijos de Marín. El delegado territorial de Fomento y Vivienda en Almería, Joaquín Jiménez, ha visitado los trabajos, que se centran en la ejecución de los pilares y en el primero de los dos estribos con los que contará dicha estructura. Según ha explicado Jiménez, el enlace tendrá tres vanos, con vigas de 30 metros y dos estribos de tierra armada. Bajo la autovía se ejecutará una glorieta que interseccionará con la carretera de La Mojonera, que servirá de conexión del núcleo de Cortijos de Marín con la autovía. Ha añadido que este enlace tiene una tipología similar al enlace existente en El Parador con el barrio Archilla, en el kilómetro 2 de la autovía de Accesos a Níjar y Roquetas y que se puso en servicio en agosto de 2016.
Respecto al resto de las obras, ha recordado que en la comisión de seguimiento celebrada la semana pasada entre la Junta y el Ayuntamiento de Roquetas ya se informó del estado actual de los trabajos y “se puso de manifiesto que se ha extendido la zahorra a lo largo del tronco de la autovía y en breve comenzará con el extendido de las capas de mezclas asfálticas a lo largo del tronco de la autovía”.
Esta segunda fase de la variante de Roquetas, la primera se puso en servicio en julio de 2016 hasta el centro comercial Gran Plaza, consta de 4,9 kilómetros en su tronco principal de autovía, más 2 kilómetros de carretera convencional de acceso a las urbanizaciones de Roquetas y, finalmente, un vial de 800 metros de conexión con el futuro Eje Viario del Poniente.
Una vez quede culminada esta segunda fase, la variante de Roquetas de Mar, que se encuadra dentro de la nueva autovía de Accesos a Vícar y Roquetas por la Autovía del Mediterráneo (A-7), se habrán totalizado los 7,4 kilómetros previstos para dicha variante de población y una inversión total de 43,3 millones de euros, que dará continuidad al tráfico de medio recorrido que discurre entre la A-7 (Autovía del Mediterráneo) y las playas del poniente almeriense.
Esta variante de población, cofinanciada con Fondos FEDER y con característica de autovía, canalizará el intenso tráfico del poniente almeriense y dará un servicio suficiente por carretera a la cantidad de visitantes que frecuentan esta zona costera durante el verano y a los habitantes de la zona.