Los gadorenses han tributado un fervoro recibimiento a su Patrona, la Virgen del Rosario, tras su regreso a la Villa de Gádor, de donde ha permanecido ausente por espacio de varios meses para ser restaurada.A mediados del pasado mes de abril y tras recibir el nombramiento de Alcaldesa Honoraria y Perpetua de la Villa de Gádor, la imagen de la Virgen del Rosario era trasladada hasta la vecina Granada para ser restaurada, junto a la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, que estructuralmente también se encontraba muy deteriorada.
Durante estos 5 largos meses de ausencia, que han parecido una eternidad a los gadorenses debido al gran cariño y devoción que sienten por la Virgen del Rosario, la Villa ha permanecido “huérfana” esperando el ansiado regreso de su Patrona, que junto a Nuestro Padre Jesús Nazareno, ya se encuentran de nuevo en la Parroquia.
Los actos religiosos para festejar su llegada y testimoniarle el cariño y respeto que por ella sienten los gadorenses se han iniciado con una Solemne Misa en la Iglesia Parroquial de Santa María de la Villa de Gádor.
En el transcurso del acto litúrgico oficiado por el cura-párroco, Victoriano Montoya, se ha puesto de relieve el gozo de todos los gadorenses por el feliz regreso de la Virgen del Rosario, a la que han mostrado su especial cariño al término del acto litúrgico con un besamanos, del que también ha sido partícipe Nuestro Padre Jesús Nazareno. Los asistentes han formado cola para ir de uno en uno acercándose a su Patrona y besar su mano, al igual que la de Nuestro Padre Jesús Nazareno, que también ha recibido el cariño de todos los gadorenses. Durante el besamanos los vecinos de la villa entonaron el emotivo himno a la Virgen del Rosario.
La satisfacción de los gadorenses es doble, ya que al regreso de la venerada imagen de la Virgen del Rosario, Patrona de la Villa de Gádor, se suma el hecho de que podrá estar presente en la Feria y Fiestas 2013, que en su honor se disponen a celebrar los gadorenses del 10 al 13 de octubre.
Recordar finalmente, que desde que se produjo su nombramiento como Alcaldesa Honoraria y Perpetua de la Villa de Gádor, los gadorenses se pusieron manos a la obra para hacerle otro regalo a su Patrona, iniciando una colecta popular de fragmentos de plata deteriorado o en desuso, para ofrecerle una nueva corona para que ésta pueda lucirla en los actos más solemnes.