En cuanto a los criterios expresados por los ciudadanos que realizan su inscripción en el registro, el 90% de ellos manifiesta su deseo de que se tenga en cuenta su capacidad de comunicarse y relacionarse con los demás, así­ como la posibilidad de mantener su independencia funcional o de no sufrir un dolor intenso que dificulte su relación con otras personas.

El 80 por ciento considera igualmente importante la posibilidad de mantener una buena calidad de vida, aunque ello suponga un acortamiento de la misma, y un 77 por ciento manifiesta su deseo de no prolongar la vida en situaciones irreversibles. En el 96 por ciento de los testamentos vitales formalizados se consigna que se tenga en cuenta lo expresado en el mismo en casos de daño cerebral severo e irreversible, enfermedad en fase avanzada o terminal o demencia avanzada, grave e irreversible. También un 94 por ciento de las personas que han realizado su Testamento Vital expresa su deseo de que se le garantice una muerte digna, y un 93 por ciento pide que se facilite a sus familiares y seres queridos la posibilidad de acompañarles cuando llegue el trance final.

El 89 por ciento pide que se le proporcione los tratamientos necesarios para paliar al máximo el dolor, aunque eso pueda suponer un acortamiento de la vida. Un 71 por ciento no desea recibir ningún tratamiento o terapia que no haya demostrado su eficacia y un 64 por ciento pide que no se le aplique ninguna medida de soporte vital o reanimación para prolongar su superviviencia. La cita para realizar el Testamento Vital puede solicitarse a través del teléfono de Salud Responde (902 505 060).

La formalización del documento se realiza normalmente en la Delegación Provincial de Salud, aunque en aquellos casos en los que los interesados no pueden desplazarse por problemas de salud o movilidad, los responsables de la Secretarí­a General de la Delegación se desplazan a su domicilio. Durante 2010 se han llevado a cabo 8 de estos desplazamientos.