Los almerienses acuden a los cementerios en el Día de Todos los Santos

Como manda la tradición son muchos los almerienses que hoy están visitando los distintos cementerios existentes en Almería para recordar a sus familiares o amigos ya fallecidos. Desde primeras horas de la mañana de hoy, Día de Todos los Santos, las inmediaciones de los cementerios se han convertido en un verdadero peregrinar de personas y de coches. Rostros serios, la mayoría, donde la única nota de color han sido los ramos de flores que con esmero y cariño han ido depositando en los nichos y panteones de los difuntos.
Son muchos los que ya habían comprado días atrás las flores para así evitar los altos precios que alcanzan este día, más si cabe con la crisis existente, momentos en los que hay que mirar más por el bolsillo.
Pero pese a ello, todos y cada una de las familias que han visitado a sus difuntos les han llevado dentro de sus posibilidades un ramo con el que honrar sus memorias.
Así el reguero de personas a los campos santos ha sido incesante, unos rezaban una pequeña oración frente a la lápida de su ser querido, mientras que otros se afanaban por limpiar y acondicionar el lugar donde permanece el fallecido, teniendo todos en común el sentimiento de añoranza y la necesidad de pasar aunque fuesen unos minutos con la persona a la que han ido a visitar.
Apuntar  que todos aquellos que hayan visitado el Cementerio de San José han entrado al mismo por lo que hasta ahora era conocida como la puerta trasera, ya que tras la apertura del nuevo tanatorio-crematorio municipal se ha urbanizado la zona de cara a conectar estas instalaciones con el propio cementerio.
Nueva entrada a la que también se ha podido acceder mediante el transporte urbano, ya que se ha instalado para tal fin una nueva parada. Sin olvidar que se han habilitado mas de cien aparcamientos de manera totalmente gratuita en los aledaños de la nueva entrada.
Un día de recogimiento para los almerienses, donde más que nunca nuestros seres queridos están presentes en nuestros pensamientos y nuestro recuerdo.