Este verano la campaña contra las medusas va a ser importante. Poco a poco están tomando las playas de la capital y también las de Cabo de Gata. Durante las últimas semanas, los bañistas han fotografiado algunas especias más grandes de lo habitual, a la que los almerienses no están tan acostumbrados. Se trata de la Rhizostoma pulmo, una especie que impresiona por su tamaño, con tentáculos de hasta metro y medio de largo. Esta pica, pero su picadura es menos molesta.

Han comenzado a llegar y todos temen que aumenten su presencia de forma considerable. Ante esto, los cientí­ficos no se ponen de acuerdo, aunque sí­ señalan dos razones para justificar esta particular visita. Por un lado, el aumento de la temperatura del mar y, por otro, la sobrepesca, que acaba con los peces que sirven de alimento a estos animales.

Que llaman la atención por su tamaño y que preocupan, no cabe duda, aunque las más temidas son las denominadas Carabelas portuguesas, de las que aparecen algunos ejemplares cada verano en Almerí­a, con tentáculos que pueden alcanzar los diez metros. Sus picaduras son más peligrosas, provocan más dolor, procesos febriles y hay que tener especial cuidado con los más pequeños.

Los expertos aconsejan, en caso de picaduras, que no froten la zona afectada ni con arena ni con una toalla. Lavar con agua salada la zona afectada y retirar con unas pinzas los restos de tentáculos. Aplicar hielo metido en una bolsa de plástico. Intentar identificar la medusa que le ha picado y acercarse a un centro médico.