El producto, una vez que la Administración sanitaria ha comprobado que es apto para el consumo humano, se ha entregado a la institución benéfica Sagrado Corazón de Jesús, de Almerí­a.

El decomiso se ha realizado en dos actuaciones, una el dí­a 4 de julio, en la que se intervinieron 21,5 kilos de pulpo, y otra el dí­a 5, con el decomiso de 37 kilos. El peso medio de los cefalópodos decomisados era de 750 gramos, cuando el reglamento establece un mí­nimo de 1.000 gramos.

"Si el pescado inmaduro no se hubiera capturado y hubiera alcanzado la edad adulta, los 58 kilos habrí­an superado los 400 kilos de peso, y además habrí­an puesto en torno a 20 millones de huevos", según ha llamado la atención el delegado de Agricultura y Pesca de la Junta, Juan Deus. La sanción prevista para estos casos de pesca de inmaduros puede ascender a 2.000 euros.

La Consejerí­a de Agricultura y Pesca realiza campañas de concienciación con el fin de sensibilizar a los ciudadanos del mal que provocan la pesca y el consumo de pescado inmaduro. En las campañas se informa de las tallas mí­nimas exigibles al pescado para su consumo y de la importancia que tiene respetarlas para preservar la continuidad de los recursos pesqueros.