Piden 20 años de cárcel para la joven que mató a su recién nacida tras arrojarla por una azotea
A continuación, cortó el cordón umbilical con "sus manos" y arrojó al bebé por el hueco entre el edificio en el que residía y el colindante, desde una altura de 20 metros. La niña falleció en el acto debido "a gravísimas lesiones craneocerebrales" que sufrió en la caída.
Según resalta el fiscal, la joven ejecutó el crimen "conociendo que sus actos eran adecuados para producirle la muerte" y subraya que se detuvo a limpiar la azotea donde había dado a luz para, después, regresar a su domicilio con sus familiares, a quienes no contó nada de lo sucedido.
La acusada fue detenida por agentes de la Policía Nacional de El Ejido tras el avisó de los facultativos que le atendieron en el Hospital de Poniente, a donde acudió a las pocas horas del parto aquejada de fuertes dolores abdominales. Los médicos constataron que acaba de dar a luz y, al no recibir información por parte de ella sobre el paradero de su bebé, alertaron a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
El cuerpo sin vida de la pequeña fue hallado en un callejón situado en las inmediaciones del número 7 de la calle Maestro José Ruiz donde residían los familiares de F.K., quienes también fueron arrestados en un primer momento de la investigación aunque la instrucción descartó que hubiesen tenido implicación en el crimen o tuviesen conocimiento del embarazo.