Un Toblerone útil

El denominado "Toblerone" desata un nuevo debate ciudadano en el que renovadores y conservadores de la obra civil ubicada en la estación del ferrocarril protagonizan sorprendidos como la pasada semana Fomento daba el visto bueno al Plan Especial del Soterramiento .

El Plan permite la segregación del Toblerone y la edificación de viviendas, con objeto de dotar a la ciudad de más servicios y recuperar la utilidad del suelo.

 

Ahora un reciente movimiento vecinal que nace en Internet concretamente en en las redes sociales , propone conservar este edificio construido en 1972 y convertirlo en una sala de convenciones con uso cultural.

Se trata de la Plataforma "Salvemos el Toblerone", que aglutinaba a media tarde de ayer y en menos de doce horas, a 1.723 miembros y del grupo "Toblerone vivo" con 1.400 miembros, en ese mismo momento.

Estos colectivos en los que se integran grupos culturales como "Artistas legañosos" y "El Marrajo" consideran que es posible imitar con el viejo silo de mineral almeriense lo que se ha hecho en otras ciudades como Madrid con la fábrica de la Tabacalera en Lavapiés o el Matadero, reconvertidos en espacios culturales o salas de conciertos.

El grupo ha recuperado un proyecto presentado por el arquitecto Fernando Vidal de la Universidad de Sevilla a la Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo para convertir el almacén en un Centro de Convenciones. El proyecto se basa en la adecuación de nueve salas de convenciones.

El autor concibe el proyecto como un espacio polivalente. Unas rampas exteriores a cada extremo generarí­an la conexión y entrada al nivel superior. Una pasarela a modo de lámina permitirí­a recorrer el interior en toda su longitud. La idea de Vidal es generar un espacio para dar a cabida en la ciudad a ferias, exposiciones, cenas, audiciones, conferencias y otras actividades culturales y sociales. Se sustituirí­a la chapa opaca actual por otra perforada de la misma tonalidad rojiza. Miguel Garcí­a Haro, miembro de "Artistas legañosos", colectivo que apoya la supervivencia del edificio, considera que "Almerí­a podrí­a contar con un espacio emblemático con un uso cultural o social, al igual que han hecho en Berlí­n o Poznan con una vieja fábrica de cerveza".

Otro de los miembros de la Plataforma, Victor Sola, habló que han contactado con el decano del Colegio de Arquitector, Javier Hidalgo, para buscar ideas de conservación del edificio. Durante todo la jornada de ayer, los foros sociales no dejaron de lanzar ideas para sus futuros usos y llevar a cabo incitativas para su recuperación o transformación..