Los rojiblancos se han clasificado para continuar en la Copa del Rey después de haber eliminado al Guadalajara, al que los almerienses se impusieron por 2-0 en una prórroga admirable y heroica por parte del conjunto de Lucas Alcaraz, que sacó fuerzas de flaqueza para superar a un incómodo y complicado rival.
Los noventa minutos reglamentarios fueron bastante competidos, aunque fueron los almeriense los que llevaron más la iniciativa y el control del balón, de manera especial en el segundo período, aunque sin crear demasiado peligro porque el Guadalajara no daba ningún tipo de facilidades; todo lo contrario. La incertidumbre fue total, pero valió la pena por lo sensacional de la prórroga con un Almería pletórico que lo dio todo sobre el terreno de juego a pesar del cansancio de los jugadores. Claro que en el equipo no pensarán lo mismo porque este sobreesfuerzo lo pueden pagar el sábado en Murcia.
Las dianas que dieron el pase llegaron el 1-0, en el minuto 115, obra de Soriano, y el 2-0 definitivo tardo siete minutos más en subir la marcador obra de Ulloa. Ahora vuelta al trabajo y a pensar en el Murcia, al que se rendirá visita el sábado a penas sin descanso y sin tiempo para preparar el choque. La vida en la segunda es así.