Y es que ese capricho del calendario ha hecho que los almerienses tengán un fin de año con enfrentamientos de entidad hemos dejado atrás al Depor, ahora llega el Hercules, y después antes de que finalize el año nos veremos las caras con el filial de Barí§a.
Pero centrándonos en lo que se avecina en la inmediatez, los de Lucas Alcaraz tienen este sábado un choque de vital importancia para sus intereses, ya que hasta el Mediterráneo llega el Hercules, los alicantinos llegan con vitola de líderes y con cinco puntos de ventaja sobre los almerienses. Por su parte los de Alcaraz necesitan sumar para intentar acortar las distancias, reencontrarse con la afición y romper esa racha que empieza a pesar como una losa de un solo punto en tres jornadas.
Las alarmas saltaron con Corona y Jakobsen, que cayeron lesionados en Riazor, las pruebas médicas han supuesto una alivio para el Almería, ya que ni el centrocampista ni el defensa están rotos. El danés, que será baja segura el sábado, por sanción, sufre un esguince en el ligamento lateral interno de su rodilla izquierda, cuyo período de recuperación se estima entre dos y tres semana. El toledano, por su parte, tiene un edema en el recto anterior de la pierna derecha y no está descartado para el partido contra el Hércules.
Será un choque en el que el técnico almeriense tendrá que lucir sus mejores galas, ya que sabe que sino la afición se volverá contra el banquillo del que es inquilino.