La Junta impulsa actuaciones en 11 zonas desfavorecidas de la provincia

La Junta de Andalucía impulsará actuaciones en 11 zonas desfavorecidas de la provincia de Almería para mejorar la calidad la vida de sus habitantes, uno de los principales objetivos de la Estrategia Regional Andaluza para la Cohesión e Inclusión Social. El delegado territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, José María Martín, ha presentado las principales líneas de esta iniciativa, que se desarrollará hasta 2022 y para ello cuenta con una inversión de más de 169,5 millones de euros.
José María Martín ha explicado que “esta estrategia permitirá actuar en 11 zonas desfavorecidas de los municipios de Almería, El Ejido, La Mojonera, Níjar, Roquetas de Mar y Vícar, contribuyendo a mejorar la calidad de vida más de 90.000 personas”.
Las zonas desfavorecidas en la provincia son Araceli-Piedras Redonas-Los Almendros, El Puche, La Fuentecica-Quemadero y Pescadería-La Chanca en la capital; Ejido Centro, Las Norias-San Agustín y Pampanico (100 Viviendas) en El Ejido; la Venta del Viso en La Mojonera; El Barranquete en Níjar; la zona de la Carretera de La Mojonera a Roquetas, en Roquetas de Mar; y La Gangosa-Vistasol en Vícar.
La estrategia arranca con algo más de 37,2 millones de euros a través de dos convocatorias de ayudas que se abrirán este año. La primera, de casi 28 millones de euros, se dirige a las entidades locales para reforzar el personal de los servicios sociales comunitarios en las zonas de intervención. La segunda, para entidades privadas sin ánimo de lucro, contará con más de 9,3 millones de euros.
El delegado de Igualdad, Salud y Políticas Sociales ha subrayado que “las zonas incluidas en el documento han sido seleccionadas teniendo en cuenta indicadores como la tasa de paro, la población inmigrante, la prestación de servicios públicos educativos y sanitarios y la existencia de problemas de seguridad y convivencia, entre otros”. Las áreas seleccionadas están, en su mayor parte, en entornos urbanos con elevada concentración de población en situación vulnerable y afectados por la existencia de barreras físicas.
Entre las medidas concretas que se desarrollarán destacan las dirigidas evitar la ejecución de desalojos por el impago de alquileres o hipotecas; incrementar la empleabilidad, con especial atención a las mujeres; favorecer el comercio local; impulsar la economía social y solidaria; incrementar la dotación de equipamientos deportivos, culturales y sociales, y constituir una red de profesionales para apoyar la actuación en las zonas y reforzar el intercambio de conocimientos y experiencias.