Detectado a tiempo, los porcentajes de curación del melanoma superan el 90%. La directora de la Unida de Gestión Clí­nica de Dermatologí­a, Mercedes Alcalde, destaca la importancia que tiene vigilar la piel para evitar la aparición de un melanoma. En ese sentido, apunta que "es conveniente consultar con un dermatólogo cuando una mancha cambia de color, tamaño o forma, es diferente al resto de manchas de la piel, es asimétrica, tiene un tacto áspero o varios colores, es mayor de 5 milí­metros, pica, sangra o tiene una superficie brillante".

Aunque cualquier persona puede padecer un cáncer de piel, éste es más frecuente en personas mayores de 50 años o aquellas que se han expuesto al sol de forma prolongada o intensa. Así­, las personas con mayor riesgo son las que tienen la piel clara o sufren quemaduras solares con facilidad, tienen historia de quemaduras solares en la infancia, pasan muchas horas al sol€“tanto por ocio como por trabajo-, se exponen al sol de forma intensa en cortos periodos de tiempo, tienen más de 50 lunares o tienen una historia familiar de cáncer de piel.

Los principales consejos que ofrecen los dermatólogos para minimizar el riesgo de cáncer de piel son buscar la sombra y no exponerse al sol en las horas centrales del dí­a, proteger la piel y los ojos mediante el uso de gorra, camiseta y gafas, y aplicar un protector solar con un factor elevado cada dos horas. Además, se recomienda extremar las medidas de protección para los niños, usando un protector solar con un factor elevado, camiseta y gorra.