Agentes que se encontraban por la zona conocida como Carretera Agua Nueva, en Turre observaron cómo en una edificación dedicada a la explotación ganadera, ya en desuso, había una ventana abierta con signos de estar forzada, por lo que los agentes procedieron a inspeccionarla.

En un estrecho y largo pasillo del inmueble hallaron a la tortuga de grandes dimensiones, sin que apenas pudiera moverse, en muy “mal estado" y con "signos evidentes de desnutrición y deshidratación".

Tras realizar las gestiones para la localización e identificación del responsable de estos hechos que acompaña a los agentes ene l momento de la recogida de la tortuga, ésta se traslada a dependencias oficiales, donde se reanima con la ayuda de agentes del Seprona. Los hechos se siguen investigando en el entorno por posible delito contra la fauna y la flora y de maltrato animal. Los agentes hicieron entrega del animal para su custodia y cuidado a un centro de acogida y reproducción de tortugas en Tabernas.