La investigación científica y forense de los restos óseos hallados entre el martes y el miércoles en el barrio ejidense de Pampanico ha determinado que los mismos se corresponden a los de una "mujer joven". Ahora las pruebas que se están efectuando están encaminadas a identificar con exactitud a la persona a quien pertenecen, dado que existen indicios suficientes para determinar la identidad. Fuentes de la Comisaría de Almería explican que en cuestión de días se podrá conocer a quien pertenece el cráneo y el hueso largo, así como otros restos oseos, hallados en una acequia junto a un invernadero de la finca 'Los Ruiseñores' por una pareja que recogía chatarra por la zona.
Dichas fuentes aseguran que los expertos no solo se están centrando en el estudio de los restos cadavéricos, con los que se ha podido reconstruir buena parte del esqueleto humano, sino que también están estudiando los plásticos y los ropajes que envolvían las restos, lo que se une a elementos de investigaciones anteriores.
Durante las próximas horas, los huesos serán sometidos a pruebas oseométricas para determinar la edad exacta de la persona a la que correspondían los huesos en el momento de perecer y otros análisis en el ámbito de la antropología forense para determinar la fecha del fallecimiento. En cualquier caso, han manifestado que "la prueba concluyente y definitiva" será la que se practique sobre la cadena de ADN.
Apuntar por último que, la Policía no descarta volver al lugar en el que aparecieron los vestigios para intentar hallar nuevas pruebas. Por el momento, los investigadores se centran en estos datos sin entrar a valorar si los restos podrían corresponderse o no a los de Lourdes García Carreño, desparecida hace siete años en Roquetas de Mar (Almería) después de terminar su turno cuando trabajaba en una gasolinera.