Carlos Sánchez enumera una serie de proyectos a afrontar en su mandato. Por lo expuesto en ellos se deduce que no hay nada nuevo, que todo es demagogia, lo que el concejal propone ya está en vigor desde 1988. La Ley 9/1988, de 25 de noviembre del Comercio Ambulante refleja la obligatoriedad de: Poseer y mostrar comprobante de compra, tener libro de reclamaciones, emitir facturas a quien lo solicite, tener en lugar visible la lista de precios, placa identificativa, etc. Desde 1988 hasta hoy ha venido siendo así­.

El resto de la propuesta del concejal, entiéndase solución al abigarramiento de los mercadillos, limpieza y seguridad, si no se ha cumplido hasta ahora ha sido por dejadez municipal ya que responsabilidad municipal es el orden y control de ellos, todos están señalizados y cumplen con las diversas normativas de seguridad.

Al mes y medio de obtener el acta de concejal, en su única reunión con el sector, el edil Sánchez recibió a los representantes del Comercio Ambulante y les comunicó que a partir del próximo mes de enero iba a aplicar el sistema de concurrencia competitiva para adjudicar todas las parcelas de los mercadillos y que vendedores de toda la vida se quedarí­an sin su puesto de trabajo sin que sirviera la antigí¼edad, ni el daño que se hará a los consumidores que podrán perder el contacto con los comerciantes a los que les han comprado toda la vida.