El secretario general de COAG, Miguel López, ha asegurado que el sector productor ha perdido por la denominada "crisis del pepino" 350 millones de euros, por lo que ha considerado que la propuesta inicial de ayudas de la Unión Europea por importe de 150 millones, es "humillante". López, ha recordado que España es el primer exportador mundial de frutas y hortalizas, que reúne un total de 250.000 explotaciones, y que el sector genera la mitad del empleo agrario y representa una producción con valor de 15.000 millones de euros. Además, ha hecho un llamamiento a los ciudadanos para que consuman productos españoles y para que "nadie dude del sistema productivo español", de su calidad y de los controles "rigurosos" de la producción.

El máximo responsable de COAG ha planteado la necesidad de que el problema surgido tras la aparición de un brote infeccioso de la bacteria "E.coli" en Alemania debe ser gestionado desde la Unión Europea, a quien también ha reclamado una ayuda "que no nos insulte, sino que sirva para reparar la situación y dar liquidez al sector para los próximos años". En este sentido, ha considerado que se necesita un "mí­nimo" de mil millones de euros para resarcir los daños provocados por esta crisis.

Por su parte, El presidente de la Unión de Consumidores de España (UCE), José Ángel Oliván, ha llamado a la implicación de los ciudadanos para que el sector recupere "el prestigio que se merece" porque pueden "estar orgullosos de los alimentos que se producen en esta tierra". Ha defendido que todos los sistemas de control de los cultivos están "contrastados" en España, que son productos "de primera calidad" y a muy buen precio que "los productos españoles están alimentando a Europa y van a seguir haciéndolo".

Por parte de la Confederación de Consumidores y Usuarios, CECU, Ana Echenitque ha destacado que todo lo sucedido tras el brote infeccioso en Alemania ha sido "muy desconcertante" y ha coincidido en que la UE deberí­a velar por la seguridad alimentaria mediante mecanismos "más ágiles y claros". Ha considerado una "vergí¼enza" que se haya culpado a los pepinos españoles del brote infeccioso sin pruebas y que en esta situación se hayan detectado "agujeros negros en la trazabilidad que no dependen de España", por lo que ha llamado al apoyo general al sector porque "aún está viviendo una pesadilla".

El portavoz de la Asociación General de Consumidores ASGECO, Jean-Bernard Audureau, ha subrayado que "no se puede demonizar a un sector" como se ha hecho en este caso con el hortofrutí­cola y ha planteado la necesidad de un "modelo de producción, distribución y consumo más sostenible y a precios justos".

210 millones de euros, insuficientes de momento

La ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Rosa Aguilar, ha manifestado que es "un avance importante", pero "insuficiente" la oferta realizada por el comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, de 210 millones de euros para cubrir con ayudas comunitarias en torno al 50 por ciento de las pérdidas que los agricultores europeos, sobre todo españoles, han sufrido por la crisis del pepino.

Aguilar ha manifestado que ante esta propuesta "hay que dejar la puerta abierta porque todaví­a no se conoce el origen del brote de la bacteria 'E.coli' y el daño no ha cesado". En su opinión, de esos 210 millones, "deberí­a llegar a España la inmensa mayorí­a por justicia y porque el sector español ha sido el más perjudicado". De este modo, dice que, junto al sector, se harán las cuentas necesarias de cada uno de los productos porque "se ha causado mucho daño injustamente y sin prueba alguna".

Según ha dicho, en este momento está habiendo en el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino una reunión con el sector donde se está evaluando la propuesta. Ha explicado que para aquellos que estén en el ámbito de la organización de productores, "la propuesta del comisario, sumada a lo previsto en la OCM de frutas y hortalizas puede significar el 80 por ciento aproximadamente".

Organizaciones agrarias

Las organizaciones agrarias andaluzas han criticado este miércoles la actitud de la Comisión Europea que ha elevado de 150 millones a 210 millones las ayudas para cubrir el 50 por ciento de las pérdidas de los agricultores europeos ante la denominada 'crisis del pepino' y han considerado que continúan siendo "escasas".

En declaraciones a Europa Press, el presidente de Asaja-A, Ricardo Serra, ha señalado que esta cifra es "insuficiente" y al decir Bruselas que es para cubrir el 50 por ciento de los daños "ellos mismos están calificándolo de insuficiente" porque "hay que cubrir el cien por cien de los daños".

Asimismo, ha apuntado que el compensar a los agricultores "no es una subasta", sino que se debe realizar un cálculo de los daños en los agricultores y compensar "el cien por cien".

Por su parte, el secretario general de UPA-A, Agustí­n Rodrí­guez, ha considerado que con este aumento en la cuantí­a "no se resuelve nada" porque "no son ayudas directas". "Lo que los agricultores necesitan son ayudas para reparar los daños que se han producido y recordar que estamos ante una situación excepcional que ha provocado un paí­s con unos daños en un sector", ha subrayado. "No es ya que sean insuficientes, es que no resuelven el problema", ha subrayado, a lo que ha añadido que "esta ayudas pero no resuelven".

Por su parte, el secretario de Organización de COAG-A, Eduardo López, ha considerado que "raya lo ridí­culo" la actitud del comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, y de la Unión Europea al elevar a 210 millones para cubrir con ayudas comunitarias el 50 por ciento de las pérdidas que los agricultores europeos ante la 'crisis del pepino'.

"Esta cifra sigue siendo insuficiente y escasa porque las pérdidas son infinitamente superiores", ha subrayado, a lo que ha añadido que esta situación ha afectado a un conjunto de paí­ses de la UE como Holanda, Francia, Bélica y la propia Alemania que están en "plena producción" y que también han recibido un "varapalo" por la caí­da del consumo y por la bajada del precio en las frutas y hortalizas.

Así­ que COAG-A "no acepta esa cantidad" que deberí­a ser "mucho mayor" y ha criticado la "actitud mí­sera" que está mostrando la Unión Europea con "un sector que no está subvencionado". De esta manera, ha instado al Gobierno de España y al resto de gobiernos de los paí­ses afectados que "peleen" para conseguir mayor presupuesto.